Nuestra protagonista entrecruza su vida, su historia y sus pensamientos con anécdotas de artistas de diversas épocas. El refugio interior de la narradora son los cuadros y sus espacios de seguridad son las salas de los museos. Es una mujer fusionada con el arte, su vida sólo puede interpretarse desde la óptica del pintor y del observador. Su pasado, su familia, sus anhelos y sus miedos son descritos en estas páginas cargadas de soledad.

Luna creciente para un libro que es una novela compuesta por relatos. Un conjunto de biografías que forman un todo, son las venas del cuerpo de la protagonista.

María Gainza (Buenos Aires) ha trabajado como corresponsal para The New York Times, ArtNews, Artforum y Radar. Ha sido profesora en talleres de crítica artística y codirectora de una colección de arte en Argentina.

¡Disfrútela quien se atreva!